Birmania goza -o sufre- el típico clima tropical de la zona
del Sudeste Asiático, caracterizado por la existencia de
tres estaciones:
LA ESTACiÓN CÁLIDA, de principios de marzo a finales
de mayo y con temperaturas muy elevadas que alcanzan
fácilmente los 402 en Yangon y hasta los 442 en Mandalay o
Bagan, en la llanura central del país.
Durante esta estación no es un buen momento para viajar por
Birmania, debido al intenso calor, que se vuelve
insoportable en la zona central, aunque es bastante
llevadero en las montañas de la región de Shan y en las
costas de Rakhine, acariciadas por una brisa cons¬tante.
En abril comienza a llover un poco y en mayo puede llegar a
alcan¬zarse los 300 mm en Yangon y 150 en Mandalay, lo que
alivia un poco el tórrido ambiente.
En esta época, la humedad en la capital oscila entre el 43%
de marzo y el 62% de mayo, mientras que en Mandalay los
mismos meses arrojan una media de 31% y 52%.
EL MONZÓN. La época de lluvias salvadora del Sureste
Asiático, que suaviza las temperaturas y riega las ricas
cosechas de arroz, comienza a finales de mayo y se extiende
hasta finales de octubre.
Las duchas suelen caer al mediodía y a media tarde y en el
Delta de Yangon se llega a medir 550 mm en julio, 400 en
septiembre y 200 en octubre. En Mandalay, sin embargo, sólo
se alcanzan los 150 mm en junio y 100 en octubre.
A pesar de la lluvia, no es mal momento para viajar a
Birmania, pues las temperaturas máximas descienden en Yangon
hasta los 342 -con mínimas de 27 o 28- entre junio y octubre,
mientras que la zona central mantiene unas máximas de 38 y
mínimas de 26.
El mayor inconveniente se presenta para quienes pretendan
via¬jar por la costa de Rakhine o el suroeste del Delta de
Yangon, donde las carreteras se vuelven impracticables. Pero
en el resto del país, con un chubasquero y un gorro o un
paraguas para los momentos de llu¬via os arreglaréis muy
bien.
Aquienes les agobie la excesiva humedad en el ambiente deben
saber que en la zona de Yangon se llega al 80% en julio y
agosto, para descender hasta el 72% de octubre, mientras que
en el centrode Birmania, la humedad relativa pasa del 66% de
julio al 78% de octu¬bre.
Paradójicamente, parece que la llanura central es más húmeda
que el Delta en este mes.
LA ESTACiÓN SECA. Entre noviembre y finales de
febrero
se da el mejor momento para viajar por todo el país.
Apenas llueve y hace mucho menos calor, sin que nunca llegue
a hacer frío, excepto en la montaña y por la noche, y las
carreteras están en mejor estado.
En Yangon las mínimas se dan en enero, cuando el termómetro
baja hasta los 20Q -aunque las máximas siguen por encima de
los 33Q. , mientras que en la región de Mandalay ambas
magnitudes se mar¬ean en los 14Q y los 33Q. Durante este mes,
la humedad es del 52% en Mandalay y del 42% en Yangon.
LA
FAUNA
Selvas
y bosques cubren casi la mitad del territorio de Birmania y
constituyen el hábitat de mamíferos como leopardos, gatos
salva¬jes, osos asiáticos y malayos, búfalos, jabalíes,
cabras, ciervos, antí¬lopes, gibones, zorros voladores,
tapires y macacos, principalmente.
Además, se estima que la jungla cobija unos dos mil tigres,
mien¬tras que diez mil elefantes asiáticos -la tercera parte
de los que exis¬ten en el mundo- representan el animal
nacional birmano. De ellos, unos 6.000 son utilizados para
trabajos de deforestación y agricultu¬ra.
Se cree que quedan algunos individuos de las especies de
rino¬ceronte de un solo cuerno y rinoceronte asiático en el
estado de Kayin, mientras que también es posible que
sobrevivan unos pocos pandas rojos en los bosques de Kachin.
Entre los reptiles, abundan las serpientes, con más de
cincuenta especies venenosas, como la cobra real o la víbora
de Malasia. Además, hay cuatro especies de tortugas marinas,
gekos y cocodrilos.
Ríos yaguas costeras de Birmania son muy ricos en pesca, que
constituye una de las dietas básicas de la población. Los
delfines I también surcan los mares' birmanos.
En cuanto a las aves, se contabilizan más de 1.200 especies
autóctonas o migratorias, entre las que destacan los pavos
reales, papagayos, fai¬sanes o garzas.
LA
FLORA
Junglas y bosques cubren casi la mitad de Birmania. En las
zonas que disfrutan de mayor régimen de lluvias abundan los
árboles de gran riqueza para la industria maderera, como la
teca -de la que Birmania es uno de los mayores exportado res
mundiales-, y otros de diferen¬tes usos, como el caucho, el
betel, mangle, bambú y coco.
El entorno forestal birmano se divide en dos ecosistemas: el
bos¬que húmedo, que disfruta de más de nueve meses de lluvia
al año, y la selva monzónica, que se ve afectada por una
estación seca de larga duración.
Entre Yangon y Mytkyina se da la selva monzónica, mientras
que al sur de Mawlamyine predomina el bosque húmedo, aunque
hay zonas del país en las que el ecosistema se traduce en
una mezcla de ambas.
En las tierras altas la vegetación se transforma en pinos,
robles y rododendros, mientras que las regiones áridas del
centro sufren una escasez de flora.
La
costa es rica en frutas tropicales, como los plátanos,
mangos, guayabas, cocos y cítricos.
El área de las estribaciones del Himalaya, en el extremo
norte, la vegetación es subtropical hasta los 2.000 metros
de altura; ligeramente tropical entre los 2.000 y 3.000
metros y bosque de coníferas subal¬pino a partir de aquí.
En cuanto a las flores, se han contabilizado unas 25.000
espe¬cies, lo que confiere a Birmania la mayor variedad en
este aspectode Asia después de China.